Patron de CharterAlia

¡Hola! Me llamo Ignacio, nací en Granada y tengo 45 años, pero no me llames Ignacio sino Nacho, me siento granadino y mi cabeza sigue pensando que tengo 25 años.

Me han pedido que escriba estas líneas hablando de mí, de quién soy y cómo he acabado siendo patrón de un catamarán de alquiler en Ibiza, no se muy bien por donde empezar pero lo que si es seguro es que no estaría haciendo este trabajo si no fuera por mis aventuras por el mundo, así que empezaré hablando de las peripecias.

¡¡¡En Granada sí hay playa!!! Sobre todo cuando tienes unos padres que, a la mínima ocasión, cargan en el coche una pequeña barca  desinflada y plegada, y ¡¡ un motor de 45 CV!!( si alguien sabe de motores sabrá que un motor de 45 cv pesa más que un sofá cama) ¡¡¡siempre a la costa cuando el tiempo acompañaba!!!. La primera vez que vi una montaña fue con 20 años…en el viaje de fin de carrera!!. No recuerdo unas vacaciones en que no estuviéramos cerca del mar, primero con la lancha, luego una pequeña motora de fibra y más adelante un pequeño velero donde descubrí lo maravilloso de navegar en silencio con el simple empuje del viento. A bordo de ese pequeño velero, «El Iluso», aprendí todo lo que sé.

Dejé las cuatro paredes de mi oficina, dejé Granada, llené mi mochila y con 37 años me fui a viajar al otro lado del mundo, Australia, a mi locus Amoenus de Byron Bay, buscando algo que no sabía muy bien que era, pero teniendo muy claro que lo que dejaba atrás era precisamente lo que no quería. En ese nuevo país, que no era el mío y viajé durante todo un año y sentí por primera vez lo que es ser completamente libre. Trabajé de de todo y me enamoré del surf.  El mar, que siempre asociaba con vacaciones, empezó a convertirse en mi día a día y eso no podía gustarme más. Surfeé todas las las mejores playas de Australia desde Byron Bay a Sydney y Noosa.

Después de un año por aquellos lares, volví a España con la única idea de volverme a ir, vendí mi única pertenencia, un coche Opel Kadett rojo comprado con un préstamo de mi madre  y con el dinero volé al país de nunca jamás para terminar mi formación como surfer y seguir en contacto directo con el mar a diario.

Cuatro meses después me encontraba en de nuevo en Byron Bay, mi locus amoenous, que siempre me ha recordado mucho a Ibiza.

De Byron a Ibiza

De Byron a Ibiza, pasando por el Nido, al este de la gran isla de Palawan. Llegué con la mochila cargada con el equipo de surf y poco más que muchas ganas de seguir la aventura…enseguida me di cuenta de que ése pequeño pueblo iba a ser mi casa por una larga temporada y quedé atrapado por la pandemia en 2020, aunque pude escapar a Australia y luego volver a Ibiza y Formentera.

Con 25 años, más o menos ;) , conseguí hacer mi sueño realidad, unir mis dos pasiones, los barcos y el surf Así, en Ibizaa, me embarqué un año. Surf y navegar, navegar, navegar y la más increíble fauna y flora marina que uno pueda imaginar.  Ni en 100 olas puedes ver tantas especies como en media hora bajo aquellas aguas de los mares de Australia.

Con mas de 5.000 olas surfeadas bajo mis pies y miles de millas marinas navegadas, la vida me trae un día a Ibiza con la idea de retomar esta otra pequeña pasión… la vela… el alquiler de barcos en ibiza y Formentera.

Ya son varias temporadas en Ibiza, como armador de catamaranes donde he podido descubrir esta otra Ibiza increíble y especial que solo se vive desde el mar. Delfines. Estoy deseando compartirlo con mis clientes de CharterAlia!!!!

¡¡¡Nos vemos en Ibiza!!!